Quienes visitan esta costa solitaria y salvaje quedan embelesados con sus impresionantes dunas, frondosos oasis, remotos pueblos pesqueros, dibujos excavados en la tierra y, en general, espacios naturales abiertos que despiertan la imaginación.
• Descifrar las misteriosas Líneas de Nazca con una memorable excursión aérea.
• Mapas.
• Contemplar la imponente naturaleza salvaje y ver colonias de aves y leones marinos con un crucero por las islas Ballestas.
• Transporte.
• Asistir a la puesta de sol desde lo alto de una enorme duna que domina un oasis de Huacachina.
• Restaurantes y alojamiento.
Incluye: Cerro Azul, Lunahuaná, Chincha, Pisco, Paracas (El Chaco), Ica, Huacachina, Nazca y alrededores, Chala, Mollendo, Moquegua, Ilo, Tacna.
Alex Egerton, periodista de oficio, ha trabajado para revistas, diarios y otros medios en cinco continentes. Cuando se hartó del aire viciado de las salas de prensa y de la sed insaciable de noticias baladíes, huyó de la rutina poniéndose a escribir sobre viajes. Es autor de guías Loenly Planet y pasa casi todo el tiempo en el terreno, mirando bajo el colchón, catando dudosa comida callejera y charlando con lugareños en su investigación para a...
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